Está basada en el principio de fototermólisis selectiva y tiene varias ventajas con respecto a otros sistemas depilatorios.
Mayor eficacia: los sistemas de luz pulsada emiten un impulso de luz intensa que se proyecta en el folículo piloso. El pigmento del folículo absorbe la luz que luego se transforma en calor. Este calor libera el cabello, destruye las células que germinan el folículo piloso de forma selectiva y previene el crecimiento de otro pelo en ese folículo. Por otra parte, gracias a la permanente luz pulsada intensa (IPL) usted estará libre de vellos indeseables durante mucho tiempo.
Mayor comodidad: la fotodepilación IPL es prácticamente indolora y no daña la piel.
Mayor seguridad: no difunde las radiaciones ultravioletas. Así pues, esta técnica no presenta absolutamente ningún riesgo cancerígeno. Los resultados son inmediatos y los efectos secundarios son prácticamente inexistentes. Además está indicado para todos los tipos de piel y para casi todas las zonas del cuerpo.